El huracán Erick, recién formado en el Pacífico, alcanzó la categoría 2 la tarde de este miércoles mientras avanza lentamente en dirección noroeste hacia las costas del sur de México, entre los estados de Oaxaca y Guerrero.
Intensificación rápida y amenaza inminente
El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC) informó que Erick ahora mantiene vientos sostenidos de aproximadamente 155 km/h (100 mph), con rachas de hasta 195 km/h. Se espera que continúe con una intensificación rápida, posiblemente alcanzando la categoría 3 antes de tocar tierra entre la noche del miércoles y la mañana del jueves.
Riesgos graves por lluvias y fenómenos derivados
Se prevén precipitaciones torrenciales en Oaxaca y Guerrero, con acumulaciones totales de entre 200 y 500 mm (8 a 20 pulgadas), lo que eleva el riesgo de inundaciones repentinas y deslaves en zonas montañosas. Además, se advierte sobre la posibilidad de oleaje elevado y marejadas, especialmente cerca del punto de impacto.
Medidas preventivas y alertas oficiales
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Conagua y el NHC emitieron alertas de huracán para Guerrero y Oaxaca.
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Se activaron planes de emergencia, incluyendo el despliegue de 18 000 efectivos según informó la gobernadora de Guerrero, Evelyn Salgado.
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Autoridades suspendieron clases y habilitaron más de 580 refugios con capacidad para más de 120 000 personas.
Comparación con huracanes previos
El fenómeno ha generado una preocupación particular por su rápida intensificación, que podría causar efectos similares —aunque menos severos— al devastador huracán Otis de octubre de 2023, que transformó de categoría 2 a 5 con gran rapidez. Sin embargo, expertos señalan que las condiciones marítimas actuales no ayudan a una intensificación tan extrema como la de Otis.
Recomendaciones para la población
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Mantenerse informados a través de fuentes oficiales.
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Almacenar víveres, agua y medicamentos esenciales.
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Seguir instrucciones de evacuación y acudir a refugios si así se indica.
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Evitar zonas bajas y propensas a deslaves, así como el paso cerca de ríos y arroyos.
Erick se perfila como el primer huracán significativo de la temporada en el Pacífico, y su evolución en las próximas horas será determinante para reducir riesgos y daños en la región.
