Minneapolis, MN, 27 de agosto de 2025 – Durante una misa escolar en la Iglesia de la Anunciación, ubicada junto a la escuela católica Annunciation Catholic School, un joven de 23 años identificado como Robin Westman abrió fuego desde el exterior hacia el interior del santuario, acabando con la vida de dos niños de ocho y diez años e hiriendo a otras 17 personas, incluidos alumnos y adultos mayores. El agresor se quitó la vida poco después del ataque. La policía considera el suceso un posible acto de terrorismo doméstico y crimen de odio contra católicos.
Los hechos minuto a minuto
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El ataque se produjo durante la primera semana de clases, justo antes de las 8:30 a.m., mientras se celebraba una misa en la iglesia.
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El agresor disparó a través de los cristales emplomados de la iglesia; se recuperaron numerosos casquillos en el lugar y se confirmó que portaba múltiples armas adquiridas legalmente.
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Se cree que intentó entrar al edificio, pero las puertas estaban cerradas, lo que posiblemente evitó un número mayor de víctimas.
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Testigos relatan una escena de caos y pánico; maestros y estudiantes intentaron protegerse entre sí mientras se desarrollaba el ataque.
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El perpetrador abandonó un manifiesto y videos inquietantes con ideología de odio, referencias a otros asesinos masivos y símbolos antisemitas y anticristianos. Las armas llevaban inscripciones perturbadoras que evocaban esos contenidos.
Reacción comunitaria y oficial
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El alcalde Jacob Frey condenó enérgicamente que algunos utilicen la identidad de género del agresor para fomentar odio contra la comunidad trans, y pidió empatía, recogimiento y unidad.
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Se están investigando los motivos, con la participación del FBI, que colabora en el caso como posible terrorismo interno y crimen de odio.
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Se llevaron a cabo vigilias en la ciudad, con miles de personas rindiendo homenaje a las víctimas, y se habilitaron centros de apoyo para las familias afectadas.
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Las banderas en edificios federales y estatales ondearon a media asta hasta el 31 de agosto, según órdenes del gobernador de Minnesota, Tim Walz, y del presidente de EE. UU..
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El Papa León XIV expresó su “profunda tristeza” en un telegrama enviado al arzobispo local, asegurando su cercanía espiritual y bendiciones a toda la comunidad afectada.
Un llamado a la reflexión urgente
Este devastador ataque pone de manifiesto la urgente necesidad de abordar la violencia armada, la radicalización ideológica y el odio religioso en entornos escolares y comunitarios. La iglesia y la escuela, espacios que deberían ser refugio seguro, se vieron convertidos en la escena de una tragedia inimaginable. Mientras la ciudad de Minneapolis y el país entero lamentan, crece también el llamado por medidas que garanticen la protección de vidas y la dignidad de todos los grupos vulnerables.
