El país enfrenta lluvias torrenciales y fuertes vientos ocasionados por la influencia del monzón mexicano, canales de baja presión y el paso de sistemas tropicales en ambos litorales. Según el Servicio Meteorológico Nacional, hasta el martes 24 de junio persistirán precipitaciones intensas, acompañadas de posibles deslaves, granizadas y exhibiciones de inundación en múltiples estados.En
Algunos de los estados en situación crítica incluyen Chihuahua, Durango, Sinaloa, Nayarit, Jalisco, Zacatecas, Hidalgo, Puebla y Chiapas, donde se reportan caídas de 150–250 mm de agua. Oaxaca, Guerrero, Michoacán y CDMX enfrentan lluvias moderadas a intensas de entre 50–150 mm, con el riesgo de inundaciones urbanas y rural-escarpadas.
En la Ciudad de México, junio se perfila como el mes más lluvioso en los últimos 21 años: se acumularon más de 220 millones de metros cúbicos de agua, provocando desbordes, encharcamientos, caída de árboles y postes, además de cortes eléctricos y congestión vial. El gobierno capitalino desplegó un operativo con 572 trabajadores bajo el plan “Tlaloque”, otorgando ayudas por más de 11.6 mdp y limpiando coladeras e infraestructura para mitigar daños.
En el Valle de México, se activaron alertas naranjas y rojas por lluvias de entre 30–49 mm desde el mediodía del 22 de junio. Naucalpan e Iztapalapa fueron algunas de las zonas donde se registraron granizo, encharcamientos de hasta 10 cm y caída de árboles, lo que generó cierres viales temporales.
Mientras tanto, comunidades rurales de Chiapas, como San Cristóbal de las Casas, han sufrido inundaciones desde finales de mayo, con afectaciones a viviendas y cortes de caminos rurales tras las lluvias constantes.
Se recuerda que la temporada de lluvias en México comenzó el 15 de mayo y continuará hasta finales de noviembre. Las autoridades recomiendan mantenerse alertas, evitar zonas de riesgo ante deslaves e inundaciones, y seguir indicaciones oficiales para proteger la integridad de la población .