La mañana del lunes 1 de septiembre la ruta aérea entre Tijuana y La Paz enfrentó un percance que sacudió a los pasajeros. El vuelo Y4-3230 (también identificado como VOI3230), operado por un Airbus A321 con matrícula XA-VLW, experimentó un descenso repentino de altitud desde su nivel de crucero hasta cerca de los 8 000 pies, activando los protocolos de seguridad aérea establecidos, entre ellos la activación de máscaras de oxígeno. Como medida de precaución, la tripulación desvió el avión para realizar un aterrizaje de emergencia en el Aeropuerto Internacional de Hermosillo, donde arribó sin contratiempos aproximadamente a las 07:49 h.
Atención y estado de los pasajeros
A bordo viajaban alrededor de 130 personas, entre pasajeros y tripulación, quienes fueron evacuados de manera segura. Algunos presentaron malestar leve y fueron atendidos por servicios médicos aeroportuarios, pero afortunadamente no se reportaron lesiones graves. Volaris informó que se les está brindando apoyo logístico para que puedan llegar a su destino final en La Paz lo antes posible.
Causas del incidente y detalles técnicos
Los reportes preliminares apuntan hacia una posible falla en el sistema de presurización como origen del descenso abrupto. En situaciones de despresurización, el avión debe descender rápidamente para alcanzar una altitud donde la concentración de oxígeno sea segura para pasajeros y tripulación, lo que explica la maniobra ejecutada. El A321 en cuestión, entregado en 2016, tiene aproximadamente ocho años de servicio.
Declaración de la aerolínea
Volaris emitió un comunicado señalando que la seguridad de sus pasajeros y tripulación es su prioridad número uno. Lamentó los inconvenientes causados por la situación y reiteró que se brindará la asistencia necesaria para garantizar que todos lleguen a su destino lo antes posible.
