El presidente estadounidense, Donald Trump, anunció hoy desde la Casa Blanca y en su plataforma Truth Social que Estados Unidos aplicará a partir del 1° de agosto nuevos aranceles a varias naciones, como medida para corregir desequilibrios comerciales crónicos.
-
Se aplicará un arancel general del 25 % a importaciones provenientes de Japón, Corea del Sur, Malasia, Kazajistán, Túnez y otros países.
-
Se elevarán las tasas al 30 % para Sudáfrica y Bosnia, mientras que Laos y Myanmar enfrentarán niveles máximos del 40 %.
-
Trump mantiene la advertencia de un arancel adicional de 10 % contra países alineados con los BRICS, las nuevas potencias emergentes.
La Casa Blanca informó que, siguiendo cartas individuales enviadas a los líderes de los países afectados, Trump firmará una orden ejecutiva para aplazar hasta el 1° de agosto la entrada en vigor de estos gravámenes, en lugar del 9 de julio previsto originalmente, con el fin de permitir la continuidad de negociaciones bilaterales.
Reacción de los mercados
Los principales índices estadounidenses sufrieron caídas significativas tras el anuncio: el Dow Jones perdió más de 600 puntos, el Nasdaq y el S&P 500 cayeron cerca de 1 %, afectando sobre todo a los sectores tecnológico y automotriz; se disparó el índice de volatilidad (VIX) y subieron los rendimientos del Tesoro.
El secretario del Tesoro, Scott Bessent, manifestó que el Gobierno mantiene abierta su agenda de negociación, pero advierte que los aranceles “serán definitivos” si no se firman acuerdos antes de la nueva fecha límite.
Repercusiones internacionales
-
La Unión Europea ha rechazado la presión estadounidense y acelera negociaciones para evitar potenciales medidas recíprocas, especialmente en sectores como farmacéutico, semiconductores y aeronáutica.
-
Las economías asiáticas, especialmente Japón y Corea del Sur, se encuentran bajo presión tras más de diez acuerdos fallidos con EE. UU. y podrían ajustar sus cadenas de suministro .
Contexto y antecedentes
Esta nueva ronda arancelaria representa una continuación de la estrategia proteccionista impulsada desde el inicio de su segundo mandato, conocida como «Día de la Liberación», que ya en abril impuso gravámenes de base del 10 % a más de 60 países y aranceles específicos a aliados tradicionales.
Las medidas buscan reducir el déficit comercial “grave” y obligar a los países a reubicar su producción dentro de Estados Unidos, aunque Washington advirtió que en caso de represalias, aplicará aranceles suplementarios, subiendo hasta un 50 % en bienes provenientes de ciertos países.
En palabras de Trump
En sus cartas a los líderes mundiales, Trump reclamó que el déficit comercial constituye “una amenaza grave a nuestra economía y a la seguridad nacional”, y exhortó a compañías extranjeras a invertir dentro de EE. UU., donde no se enfrentarían a estos gravámenes